Mientras que en Europa hay más de 150 fábricas que producen hormigón celular, en España aún no hay ninguna. Sin embargo, la extensión del uso de este material como sustituto de otros tan tradicionales y populares como el ladrillo ha llevado a algunas compañías a empezar a producir este material en nuestro país.
El hormigón celular tiene todas las propiedades del material aislante y muchas más ventajas añadidas, lo que le permite cubrir las necesidades y expectativas en torno a las exigencias relacionadas con el aislamiento de la envolvente de una casa o edificio, que al fin y al cabo es la clave para alcanzar el confort térmico.
Y en este contexto, la solución de añadir a la estructura de ladrillo una capa de aislamiento y un panel de yeso podría empezar a caer en desuso, precisamente por la tendencia -cada día más acuciante- a utilizar hormigón celular.
Aislamiento térmico y acústico
Este material abriga frente al frío y refresca ante el calor, gracias a su estructura porosa. Una característica que tiene su consecuente reflejo en el abaratamiento de la factura eléctrica. Más allá del aislamiento térmico, es de reconocer sus ventajas a la hora de silenciar los ruidos, debido también a esas propiedades porosas.
Contra las humedades
Asimismo, las viviendas y edificios construidos con hormigón celular no suelen presentar ninguna señal de humedad, destacando la transpirabilidad de un material que, a su vez, previene la aparición de hongos y moho. De igual modo, como el hormigón celular no tiene huecos por dentro, no deja a los insectos crear sus colonias dentro de los muros, lo que supone un quebradero de cabeza en tantas y tantas ocasiones.
Abarata la factura energética
Además, de suma importancia en estos tiempos que vivimos, el uso en construcción del hormigón celular curado en autoclave puede reducir las facturas de la luz o el gas hasta tres veces, lo que resulta especialmente relevante en un momento de crisis energética como la actual, que ha disparado las facturas hasta niveles que no dejan de batir récords y están poniendo en serios aprietos a un buen número de constructoras y consumidores.
Reduce los tiempos de ejecución de una obra
Otra de sus más destacadas ventajas tiene que ver con la reducción de los tiempos de ejecución de una obra, debido fundamentalmente a la precisión del tamaño de los bloques, a su peso ligero… Y ello, al fin y al cabo, también redunda en el precio final.
Finalmente, valgan otras ventajas relacionadas con la sostenibilidad de este material, su alto grado de resistencia al fuego, la opción de utilizarlo tanto para los muros exteriores como para tabiques, su resistencia y dureza… Por no hablar de que se trata de un material ecológico, hipoalergénico y sin contraindicaciones en la salud humana.